lunes, 24 de enero de 2011

MORNING GLORY


Grata sorpresa este Morning Glory.
Lo ciero es que no se muy bien como explicarlo, pero entré al cine esperando otra película floja, blandengue, de guión desordenado y personajes estereotipados y excéntricos (más propios de la factoría Apatow), pero nada más lejos de la realidad. Morning Glory supone a mi entender un ligero soplo de aire fresco en cuanto a comedias románticas se refiere.

Ésta cuenta la historia de Becky Fuller (Rachel McAdams), una joven y entusiasta mujer demasiado absorta con su trabajo como para poder establecer cualquier tipo de relación seria.
El trabajo es en el mundo de la televisión como productora ejecutiva de una cadena de televisión estadounidense en la que tutela entre bambalinas el incesante "cámara 2, plano de Mike!, cambio a cámara 4, entra George..." de un programa matutino de noticias.
Justo el día en que Becky pensaba que iba a ser ascendida, resulta que es despedida.
Así que se muda a New Jersey, encuentra un trabajo en otra empresa y se hace cargo de otro programa del estilo. Pero aquí la presión es mayor, y enseguida la exigen resultados en forma de audiencia a costa de cualquier cosa, lidiar con un nuevo grupo humano, y sobre todo con la nueva incorporación de un Mike Pomeroy (Harrison Ford) gruñón, engreído y egoísta. Papel que sin saber muy bien porqué le sienta de fábula.
Por cierto que el mismo actor declaró que ésta película simplemente la había hecho porque
"tenía que comer". Reconozco que al oir ésto me hizo gracia el socarrón de Ford. Qué jodío el cabrón... En fin, para una película en la que no le parten el labio inferior por intentar salvar a algún familiar de alguna banda organizada del hampa, va y se queja!
Será que de los 40 millones de presupuesto se habrá llevado poca porción del pastel.

En fin, la verdad es que si le echais un poquito de imaginación el resto ya lo podeis deducir sin mucho esfuerzo...
Chica conoce a chico que después de unos cuantos sube-baja en su vida laboral / personal termina por aprender una (o un par) valiosa lección.
Es así como la joven Becky da un paso más en el proceso de autorealización vital.
Bien. Cierto es que no deja de ser un producto más que explotado por el cine actual, pero dejar que me explique en lo referente a mi impresión inicial.
Hay ciertas películas que son una pastelada y otras simplemente un par de bombones entre horas. Es decir, siendo ambas propuestas dulzonas y predecibles, la segunda es más ligera que la primera.
Y qué coño! Es bonito de vez en cuando no ser jodidamente cínico y mordaz con todo lo que te rodea, y dejarse llevar por la suave corriente de una película que, de cuando en cuando, es capaz de hacerte esbozar una sonrisa y tenerte entretenido durante aproximadamente una hora y media sin necesidad de mirar el móvil para saber la hora.
Además, la banda sonora puramente pop (con una curiosa versión del "Stuck in the middle with you" que me da ganas de ponerme a rebanar orejas), además de muy recomendable, acompaña estupendamente al ritmo de la película.

Para finalizar, tres cosas más:
1 - Rachel McAdams me parece preciosa y encantadora.
2 - Por ninguna de las casualidades veais la película como una aproximación a una voraz visión del mundo de las televisiones, para eso os propongo Network. Un mundo implacable, y no saldreis decepcionados.
3 - Lo siento a todos los "med for it" como un humilde servidor. Respuesta a vuestra pregunta. No, no suena en ningún momento el What's The Story (Morning Glory)? de los hermanos Gallagher.

Arkaitz.

1 comentario: